El pleno del Consell celebrado esta mañana ha sido el último para varios consellers. El único nombre de conseller saliente que conocemos hasta ahora es el de Vicent Marzà, ya que él mismo ha anunciado este miércoles que deja la Conselleria de Educación, Cultura y Deporte para centrarse en su partido, Compromís, de cara a las elecciones del próximo año.
Sin embargo, los otros consellers con fecha de caducidad serán socialistas y el presidente de la Generalitat, Ximo Puig, a quien esta crisis se le ha hecho bola, tiene previsto anunciar sus nombres este fin de semana.
No obstante, la vicepresidenta del Consell, Mónica Oltra, no se ha atrevido a asegurar de que Puig vaya a comunicar los cambios este sábado, lo que puede ser una señal de que alguna dificultad se está encontrando. “Yo creo que la voluntad del presidente es que sea mañana, ahora, a veces la voluntad es una cosa y las posibilidades otras”, ha señalado la vicepresidenta en su habitual rueda de prensa de los viernes.
Los únicos consellers de la cuota socialista que todo el mundo da por hecho que van a continuar, aunque no esté claro en qué cartera, son la titular de Justicia, Gabriela Bravo, y el actual conseller de Política Territorial, Obras Públicas y Movilidad, Arcadi España, quién el lunes tenía prevista la inauguración de la Línea 10 del metro de Valencia que finalmente se va a retrasar un día.
Después de la dimisión de Manolo Mata hace unos días como portavoz del PSPV-PSOE en Les Corts Valencianes, Puig dejaba entrever la posibilidad de que se produzcan cambios en el Consell, trasladando su intención de estudiar de qué manera pueden dar un impulso a la acción del gobierno, que viene sufriendo un cierto desgaste en las encuestas y necesitaría recuperar así el apoyo de la ciudadanía.