La vicealcaldesa de Valencia, la socialista Sandra Gómez, ha conseguido que el Ayuntamiento le ponga el nombre de Francisco Largo Caballero a una de las calles de la ciudad.
“Una ciudad vital es una ciudad respetuosa e inclusiva, donde no caben los discursos de odio y ningún símbolo o posición fascista. No se puede amparar denigrar y pisotear la memoria de quienes defendieron la democracia frente al fascismo”, ha manifestado Gómez.
Largo Caballero, líder del PSOE y la UGT durante parte de los convulsos años 30, era conocido como el ‘Lenin español’. Antes, colaboró con la dictadura de Primo de Rivera en cuestiones sociales. En 1933 abogó por el éxito de la Revolución frente a las derechas, incluso violentamente. También fue cabecilla de la Revolución de 1934 contra la República, que le acusó de rebelión militar, aunque finalmente fue absuelto. Al comenzar la Guerra Civil asumió la presidencia del Gobierno, desde la que permitió la creación de ‘Checas’ o carteles del pueblo, a la vez que armaba a los sindicatos.
El Ayuntamiento de Madrid eliminó su nombre de una calle en el año 2007 en aplicación de la Ley de Memoria Histórica, mientras que Valencia, en cambio, le pondrá ahora una.
La calle de Largo Caballero tendrá su ubicación en la actual prolongación de Bailén, en el tramo del cruce con Doctor Vila Barberá y San Vicente Mártir.
La decisión se ha adoptado a la vez que la de bautizar otra calle, situada junto al IVAM, con el nombre de Carmen Alborch, una mujer que, en palabras de la vicealcaldesa, fue “una luchadora incansable por los derechos de las mujeres y de la igualdad y proyectó esos valores desde todos y cada uno de los cargos de responsabilidad que ocupó a lo largo de su vida”.